Hola, hoy os quiero hablar de algo que muchas veces no tenemos claro con respecto a los distintos tipos de licencias que podemos tener hoy en día con Windows 10. Como sabemos, si queremos utilizar Windows legalmente necesitamos activarlo. Para ello, disponemos de diferentes tipos de licencias: OEM, RETAIL y por volumen (KMS o MAK). Las que solemos ver más a menudo son las dos primeras:
OEM (Original Equipment Manufacturing): Son las que suelen venir cuando compramos un ordenador, y van ligadas al hardware del equipo. ¿Qué quiere decir esto? Que si cambiamos componentes como la placa base, el procesador o incluso el disco duro, la licencia quedará inservible y tendremos que adquirir otra. No suele dar problemas al cambiar la RAM u otros componentes como la tarjeta gráfica, de sonido o de red. Estas licencias se pueden encontrar a la venta por internet, siendo más baratas que las RETAIL aunque oficialmente están destinadas a fabricantes o a aquel que se dedique a vender equipos, aunque siempre hay cierta controversia con esto porque hasta la llegada de Windows 7 era posible activar oficialmente un equipo montado por piezas con una licencia OEM, desde Windows 8 están limitadas, e insistimos, oficialmente a fabricantes.
Un detalle importante con este tipo de activaciones es que en caso de haber algún problema técnico el soporte es proporcionado siempre por el fabricante del equipo con el que se vendió la licencia, Microsoft se desentiende en este caso. En el pasado había problemas al actualizar a nuevas versiones de Windows, pero con Windows 10 Microsoft ha dado más margen a esto.
Si disponemos de una clave OEM podemos comprobarlo con el comando «winver» desde cmd, y veremos que está concedida a un fabricante, en el ejemplo HP.
También veremos en el Product ID del equipo las siglas OEM:
RETAIL: Este tipo de licencias se suele decir que van ligadas al usuario, es decir, que podremos activarlas en todos los equipos que queramos, con cualquier configuración de hardware, pero sólo podremos tener un equipo activado al mismo tiempo. Son más caras que las OEM y son las que están disponibles oficialmente a la venta para usuarios que deseen montar su equipo personal por piezas (o para los equipos que se venden sin sistema operativo Windows).
Si disponemos de una clave RETAIL podemos comprobarlo con el comando «winver» desde cmd, y veremos que está concedida a un usuario:
Además de estos dos tipos, tenemos las licencias por volumen o GVLK (Generic Volume License Key), que se suelen ver en entornos empresariales y se pueden activar en varios ordenadores a la vez. Las empresas que necesitan activar muchos equipos contactan con Microsoft y compran licencias por lotes, consiguiendo un ahorro considerable. Estas licencias permiten activar un número determinado de equipos usando la misma clave.
KMS (Key Management Service): Si disponemos de una licencia por volumen, podemos optar por implementar un servidor KMS con Windows Server que se encargará de activar las máquinas que se conecten a él, es en este servidor KMS donde tendremos que introducir la licencia por volumen. Los equipos cliente buscarán un servidor KMS en la red normalmente a través de una consulta DNS, aunque también lo pueden hacer mediante una clave en el registro. Con este sistema no necesitamos de conexión a Internet.
MAK (Multiple Activation Key): Otra forma de activación por volumen es mediante claves MAK, pudiendo activar con una misma clave un número determinado de máquinas, dependiendo de cuantas licencias hayamos comprado a Microsoft. Con este sistema necesitamos conexión a Internet para que las licencias queden validadas contra un servidor de activación de Microsoft, eso sí, una vez activada por primera vez, ya no necesitaremos Internet.
Existe una herramienta GUI para administrar y automatizar de forma centralizada la activación de los diferentes productos Microsoft, tanto ediciones de servidor como de cliente, así como la suite Office, llamada VAMT (Volume Activation Management Tool). Con esta herramienta podremos utilizar indistintamente claves KMS o MAK. Esta herramienta se instala en Windows Server, se descarga de forma independiente y necesita una base de datos SQL. La podéis descargar desde aquí:
https://docs.microsoft.com/en-us/windows-hardware/get-started/adk-install
Nota: Muchas veces me preguntan por las licencias que se encuentran en Internet por precios incluso por debajo de los 2 euros, hay que decir que esto es ilegal, este tipo de licencias puede que sean robadas, por lo que incluso el comprador podría tener problemas al adquirirlas, pero también puede ser que se trate de licencias originales destinadas a ayuntamientos, colegios o cualquier otra asociación que tenga un convenio con Microsoft a través de una empresa privada. Con una gran probabilidad podrían tratarse de claves MAK, y que estén vendiendo muchas copias de una misma licencia. Lo que está claro es que, este tipo de licencias podrían dejar de funcionar en cualquier momento ya que Microsoft es plenamente consciente de ellas (al igual que son conscientes de que los precios son demasiado elevados para muchos usuarios). No se sabe si en un futuro podrían adoptar algún tipo de medida con estas licencias, aunque viendo las facilidades que había incluso para actualizar desde Windows 7 pirata a Windows 10… 🙂 Sea como fuere, a Microsoft le interesa que el sistema operativo de escritorio por excelencia siga siendo Windows, y seguir en la lucha con Android aunque sean plataformas diferentes:
Y esto es todo por hoy, en futuros artículos os hablaré más detalladamente de diferentes comandos que podemos usar para activar los equipos.
Un saludo!
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